Dedicado a la entrada de hoy a mi comadre, Ester AUTODIDACTA...
¡EL PLANETA NO NOS PERTENECE, SOMOS NOSOTROS LOS QUE PERTENECEMOS AL PLANETA!
Ester y una menda, me lo regaló y ahora presumo con él ¡Arsa!
Nuestros abuelos, padres...muchos no eran universitarios, pero estaban mucho más concienciados en la buena convivencia y las normas de respeto , en el pensar en los demás y en el futuro de generaciones venideras.
Siempre me gustó estar entre mis mayores, aprendí de ellos mucho y bueno y esos valores los pasé a mis hijos...no todo el aprendizaje están en los libros de textos, también está en escuchar y observar...y preguntar...
Recuerdo que en casa había una bolsa para ir a comprar y guardar el pan, otras para las compras. Se tenía la responsabilidad de no ensuciar. ¿Qué dirían si vieran la orilla de muchas playas con todo tipo de basura contaminante, los atascos que irresponsables e incívicos producen atascos inmensos con las toallitas "biodegradables"? que nos cuestan 12 millones de € a los contribuyentes? En casa, para lo más sucio o grasiento se limpiaba con bicarbonato , jabón y vinagre, todo quedaba bien escamondao y no se contaminaba...
ECOLOGÍA
En una cola del supermercado, el cajero dice a una señora madura que debería traer su propia bolsa de compra porque las bolsas de plástico son dañinas para el medio ambiente.
La señora pide disculpas y explica:
-" Es que en mis tiempos no pensábamos en la ecología"-.
El empleado le contesta:
-"Ése es el problema que tenemos ahora. La generación de ustedes no se preocupó de preservar el medio ambiente"-.
-"Tiene razón-dijo la señora-. En aquellos tiempos no pensábamos en la ecología. En aquel entonces las botellas de leche, refrescos y cervezas se devolvían a la tienda, la tienda las enviaba de nuevo a la fábrica, donde las lavaban y esterilizaban...antes de llenarlas de nuevo, de manera que se podían utilizar los mismos envases una vez y otra. Así los reciclaban eficaz y economicamente.
Pero es verdad, en aquellos tiempos no pensábamos en la ecología. Subíamos y bajábamos las escaleras, porque no había artefactos mecánicos...ibámos andando a la tienda en lugar de usar el coche de 200 caballos cada vez que teníamos que recorrer dos manzanas, pero tiene usted razón, en aquellos tiempos no pensábamos en la ecología.
Entonces lavábamos y reutilizábamos los pañales de los bebés, porque no había de un solo uso, secábamos la ropa en tendederos, al sol, para blanquearlas, (ya tenían inventada la ecología y no usaban lejía), no en esas máquinas de 200 voltios que consumen mucha energía rugiendo para secar la ropa, las energías solar y eólicas secaban estupendamente.
Los niños usaban la ropa de sus hermanos mayores, no siempre modelitos nuevos, creíamos que aparte de un despilfarro era, sobre todo, acostumbrarlos mal si no lo hacíamos así.
-Pero tiene usted razón; en aquellos tiempos no pensábamos en la ecología. Por entonces teníamos un televisor o una radio en bastantes casas. No un televisor en cada habitación y un equipo de música de miles de vatios. El televisor tenía el tamaño de un pañuelo. ¿lo recuerdas? no una pantalla del tamaño de un campo de fútbol.
En la cocina, molíamos, batiamos y desmenuzábamos a mano, porque no habían tantos aparatos eléctricos que lo hacen todo por nosotros.
Cuando embálabamos algo frágil para enviarlo por correo usábamos papel de periódicos arrugados para protegerlo, no en envoltorios de burbujas o bolitas de plástico.
En aquellos tiempos no encendíamos un motor y quemábamos gasolina sólo para cortar la hierba. Usábamos unas tijeras cortadoras que funcionaban a músculo, también hacíamos ejercicios trabajando y no necesitábamos ir a un gimnasio para correr sobre en una pista mecánica que funcionan con eléctricidad...
Pero tiene usted razón, joven: en aquellos tiempos no pensábamos en la ecología.
Cuando teníamos sed bebiamos en una fuente en lugar de usar vasos de plásticos, cada vez que queríamos beber agua. Recargábamos las plumas estilográficas con tinta, en lugar de tirarlas y comprar una nueva. Los niños usaban en la escuela para los ejercicios de "mates" la pizarra con su pizarrín, no se despilfarraba papel.
Y mi padre y hermano cambiaban la hoja de afeitar en vez de tirar a la basura toda la maquinilla sólo porque la hoja ya no corta, pero, claro, entonces no pensábamos en la ecología, tiene razón.
Se comía potajes, arroces, hortalizas, hechos en la "olla", mientras mi madre se duchaba y nosotros poniamos la mesa, se merendaba el riquísimo "hoyo", (pan con aceite de oliva) y una taza de leche...y los niños no estaban obesos.
Los chavales iban a la escuela en bicicleta o andando, en lugar de usar a su madre o abuela como "taxista" disponible las 24 horas.
En cada habitación teníamos un enchufe, no tantos para alimentar una docena de artefactos.
La "comida rápida" era un buen bocata de jamón, queso o filete con aceite y una pieza de fruta, que era y es todavía muy saludable, para una emergencia, pero tiene usted razón...en aquellos tiempos no pensábamos en la ecología.
Después de merendar y hacer los deberes, los críos a jugar, hasta que mi madre venía para que nos duchásemos, cenar, mientras les contábamos a los papis qué tal nos fue el día. A las 21,00 a dormir....¡sin rechistar!
Sí, muchacho, entonces no pensábamos en la ecologia...Sigo de vacaciones, pero me he dado un breve garbeo por algunos blogs y no he pòdido aguantarme en "contestar", es decir, apoyar tu entrada, Ester.
Hasta pronto y buen final de Semanan Santa para todos.
Abrazos.
Mi madre siempre nos decía: No es más limpio el que más limpia sino el que menos ensucia...y cuanta razón tenía.Besicos
ResponderEliminarComparto totalmente ese criterio de tu madre y veo que lo asimilaste.
EliminarOjalá se "contagien" y empiecen por ahí la gente.
Un besote.
Entonces éramos ecologistas sin saberlo. Un beso
ResponderEliminarRespetábamos y aprendimos, ahora se rompió lo establecido durante siglos y claro está que eso tiene sus consecuencias...
EliminarBesos.
Buen final de Semana Santa también para ti.
ResponderEliminarAquí quedamos esperándote. mientras pensamos en la ecología.
Un abrazo.
Ha sido bueno, ajetreado con los diablillos, pero hemos disfrutado.
EliminarBueno, ahora toca atenderos a todos y muy agradecida que os estoy por venir.
Besos.
Debemos ser respetuosos con nuestro planeta y con las personas que lo habitan. Me ha encantado leerte cariño y esa foto tuya y de Ester es una pasada. Siempre me ha gustado. Un beso muy fuerte :D
ResponderEliminarPese a todo, mantenco la esperanza en que se comience a reaccionar...
EliminarLa imagen es toda un primor y lo recibí tan contenta que lo dejé en portada, es muy cariñosa y una gran "manitas".
Besos y espero que lo hayas pasado muy bien.
Es que nos hemos creído que la Tierra es nuestra y tan solo nos la han prestado un ratito.
ResponderEliminarSalud
Es nuestro habitad, para vivir en ella, no para destrozarla...
EliminarSalud.
Muy cierto, antes no se pensaba en la ecología, y hoy vivimos las consecuencias.
ResponderEliminarCon la llegada del plástico, se siguió el modo, quienes llevaban la Coca Cola de vidrio al almacén les resultó más práctico, no llevar envase, incluso uno desechable y mas liviano y nadie dijo nada.
Antes las máquinas de afeitar costaba un dinerar, salieron las desechables y de plastico; y los mismo que usaban las primeras se cambiaron a las desechables, y nadie dijo nada.
Claro ahora culpan a la generación actual, como si fuera otro planeta... asi es refacil culpar al joven y no asumir responsabilidades...
Creo que soy mayor que tú, esto viene de varias décadas atrás, se rompió lo establecido arraigado durante siglos, estamos recogiendo la "Cosecha" que fuimos plantando, por abreviar...
EliminarGracias por participar.
Mi vajilla quda reliciente, añadiendo al detergente líquido bicarbonato y vinagre,
ResponderEliminarBesos
Y la mía, y la cocina. En la lavadora: jabón y bicarbonato, resultados insuperables.
EliminarUn beso.
Te das un garbeo y nos pones las pilas, no se tiraba nada, el ajuar duraba toda la vida, no existía IKEA y los muebles al ser de verdad duraban toda la vida, los electrodomésticos se reparaban, no habían inventado la obsolescencia programada. Lo que tiene ahora los jóvenes, ministros o no es gracias a nosotros, algo que ya ha terminado porque ahora ellos no podrán dejarles a los que vengan detrás ni siquiera libros de texto con historia y filosofía. Abrazos
ResponderEliminarYa puedes intuir que suscribo tu comentario enterito.
EliminarY todo lo que de él se desprende.
Lo que están haciendo en Educación es impresentable. Lo pagaremos aún más caro.
Besos.
Muy cierto Marticarmen! No se pensaba en la ecología, se practicaba con las buenas costumbres! Ahora hay mucho blablabla y poco hacer, un abrazo y Muy Feliz Pascua!
ResponderEliminarLo teníamos asumido, así de sencillo.
EliminarGracias , mi niña.
Un beso.
hay que respetar el legado que encontramos, pero veo que no es así. Lamentablemente.
ResponderEliminarUn abrazo
¡Uf! No es así desde hace mucho tiempo y no se frena, no, no hay voluntad.
EliminarUn beso.
Nos olvidamos de que educar a los hijos no solo se hace en la escuela; en la casa, los padres también tienen/hemos tenido una parte alícuota de la educación general, parece que eso hoy se ha olvidado.
ResponderEliminarSaludos
Hola Emilio, hay cierto amplio colectivo de padres que piensan equivocadamente sobre la escuela, ellos "aparcan" en ella a sus hijos y pretenden que la sagrada labor de educar las hagan los docentes, vosotros estais para enseñar, en todo caso para colaborar, pero la batuta es de los padres, son ellos los que tienen que potenciar vuestra labor, mantener la debida consideración y fomentar el respeto al maestro, escuela y compañeros. Lo sé porque a nuestros hijos los formamos tal como digo con los resultados excelentes y hoy son mujeres y un hombre estupendos, bien situados en la vida, con sus familias y el recuerdo agradecidos a sus maestros. Ya todos emancipados felizmente...
EliminarNo sé si me he explicado todo lo bien que he pretendido...
Mis salidos.
Pues sí.
ResponderEliminarLa vida cambió y muchas cosas a peor.
Yo también recuerdo ese pan con aceite para la merienda, o esa bocata de cualquier cosa que lo comías subido en una piedra mientras oía el canto de los pájaros o el cacareo de las gallinas.
Estamos acostumbrado mal a los pequeños, dándoles todo en todo momento y olvidando la cultura del esfuerzo. ¿Qué es eso de dejarles en coche en la puerta del colegio o el instituto cuando está a pocos metros de casa? Yo me hacía 2 km de ida y 2km de vuelta andado, desde el Instituto a mi casa, a así todos los días (los 3 años de BUP y el año de COU)
Eran otro tiempos.
Hoy toca cocido en el puchero de barro de la abuela. Hecho tranquilamente, a fuego lento en la lumbre de leña.
¡Feliz domingo!
Pues coincidimos en todo, ojalá se enmiende todo esto, es más un deseo que un convecimiento.
EliminarGracias Manuel por tu aportación
Buena semana.
Estamos en tiempos en que reina la tontería generalizada y no algo tan simple como el añorado sentido común.
ResponderEliminarBesos.
Ese es el origen de todo, la pérdida del sentido común que tenemos, además generaliazado en todo...
EliminarUn beso.
Buena respuesta a nuestra Ester. Verdades como catedrales.
ResponderEliminarUn abrazo!
Ella es la que lo inició, es un temazo, yo no he hecho nada especial.
EliminarBesotes.
Un beso enorme :-) y feliz Pascua florida.
ResponderEliminarHola Mag, gustazo en saludarte.
ResponderEliminarFelices Pascuas también para ti, preciosa.
Besos,
Auténticas verdades, muy de acuerdo con el tema que planteó Ester ¡qué grandes sois las dos!
ResponderEliminarUn besazo.
A mi me encanta estos tipos de participaciones, de ella fue la idea, no mía.
ResponderEliminarGracias Montse.
Un beso
Muy bueno, me ha encantado. Besos.
ResponderEliminarYa me doy por contenta, gracias cielo.
ResponderEliminarBesos.
Muchas gracias Teresa.Abrazos.
ResponderEliminar¡Olé mi niña!
ResponderEliminarAgradecida.
Besitos.
Eres una amiga, jejejeje.Gracias.
ResponderEliminarAbrazo.